Josep Borrell de la vieja guardia del "felipismo", enamorado de los Estados Unidos y un encarnizado odio hacia Cuba, China (por su sistema comunista) y Rusia que ya no es comunista (pero no importa porque también es enemigo de EEUU) pero que además, incongruentemente, el señor Borrell es un admirador de Arabia Saudí, al que España vende armas y munición como "bombas humanitarias", que obviamente matan niños, mujeres y lo que venga.
Amigo personal de Felipe González con el que ocupó varios puestos de relevancia y fue su ministro de Obras Públicas y Transportes y luego tras el retiro de González como secretario general, aspiró a la Moncloa, compitiendo con Joaquín Almunia en la ejecutiva del partido en abril de 1998. Una elección en la que Borrell se impuso. Sin embargo, un año más tarde renunció como candidato a la presidencia de Gobierno tras estallar el caso Huguet-Aguiar que lo salpicó involucrando directamente a dos personas de su confianza en una investigación por fraude fiscal y cohecho.
Desaparecido de las tablas políticas, reapareció en un mitín convocado por las derechas y ultra derechas en Catalunya contra el independentismo. Condenado en el 2015 por infracción grave por beneficiarse con la venta de acciones días antes que la empresa Abengoa cayera en picada utilizando información privilegiada, finalmente reaparece en la política nombrado Ministro de Exteriores en el gobierno de Pedro Sánchez. Aunque posteriormente el propio Sánchez se lo sacó de encima enviándolo a la Unión Europea donde ejerce como jefe en Asuntos Exteriores.
El pasado lunes, en la página oficial de la Comisión Europea, Josep Borrell escribía un artículo donde explica, en cuanto al coronavirus, que nos encontramos en una situación bélica, haciendo entender que en esta contienda el enemigo es China, reprobando y sospechando sobre las ayudas solidarias que de allí provienen.
A raíz de estas declaraciones, el gigante chino de telecomunicaciones, líder en tecnología de punta Huawei, ha suspendido de forma rotunda, las millonarias donaciones de material sanitario a España y otros países de la Unión Europea, por temor de verse en el juego de esta supuesta contienda bélica que cunde por la cabeza del señor Borrell.
De esta forma, España se ve perjudicada en los momentos más cruciales de la crisis del coronavirus por falta de material sanitario y la ayuda exterior que sólo viene de China y algún otro país asiático en menor medida. Ni EEUU, ni siquiera la Unión Europea ha mostrado un gesto de solidaridad con España, ni siquiera en lo comercial en cuanto a la provisión de elementos de sanidad que deja en claro el concepto de "sálvese quien pueda".
ESPAÑA NO NECESITA AYUDA DE CUBA
Personal sanitario cubano pasando por Barajas con rumbo a Andorra
Además es tan fuerte el relato político de las derechas y de las ultraderechas que ha calado muy profundo en la conciencia de muchos españoles en cuanto a sostener como enemigo de España (siguiendo como tontos la política expansionista de EEUU) no solo a Rusia, China sino a varios países de latinoamérica que se enfrentan contra el imperio norteamericano, entre ellos Cuba, que España también desiste de la ayuda solidaria proveniente de la isla del caribe. Único país de latinoamérica que ha enviado refuerzos humanos a Italia profundamente castigada con el coronavirus y otros como nuestro vecino Andorra a la que llegaron recientemente, pasando por Barajas, una comitiva de médicos y enfermeros cubanos para contener la pandemia en ese protectorado.